miércoles, 20 de octubre de 2010

Estampas otoñales en el jardín

Igual que cambia el tiempo meteorológico, se mezclan estos días imágenes de final de verano con otras ya puramente otoñales.

Los nenúfares más rústicos aún muestran alguna que otra flor y la rara variedad de passionaria, Passiflora sp., que crece en la pared sur de la casa pasará, como todos los años, de estar florida a helarse una de estas noches.

Estas flores tardías les vienen muy bien a algunas abejas, avispas y fundamentalmente a los abejorros Bombus, que aún se ven activos los días de sol. Cuando tenía esta planta dentro de la terraza cubierta no se helaba en invierno, pero su aspecto era mucho peor y, aunque daba numerosos frutos, las maracuyás, estos estaban tan vacíos como los pocos que le crecen ahora. Cada año vuelve a brotar con renovado vigor y florece durante varios meses hasta que el frío puede con ella.

Pero la enredadera que ahora luce en todo su esplendor es la parra virgen, Parthenocisus, que además de mostrar las hojas rojas tiene sus frutos parecidos a las uvas, como corresponde a una especie de la misma familia que las viñas. He leído que algunas de estas uvas pueden ser comestibles, pero dado que hay bastantes especies de estas parras y que son difíciles de diferenciar, yo no lo intentaría y, además, las mantendría alejadas de niños golosos.
Entre las hojas de la parra de la foto se ven también las de hiedra, Hedera helix, con sus modestas flores. Aunque no tengan color llamativo son visitadas por abejas y avispas y especialmente por dípteros, como esta moscarda, Calliphora sp. En todas las fotos de moscardas que tengo se aprecia lo sucias que son, completamente distinto al brillante aspecto de las abejas y avispas, aunque estén alimentándose en las mismas flores. Sobre su tórax y abdomen siempre hay partículas con aspecto de caspa.

También tiene bayas el durillo Viburnun tinus, con propiedades diuréticas y laxantes, pero con un grado de toxicidad tan alto que es mejor no intentar hacer preparados caseros con ellas por lo difícil de controlar las dosis. Parece que son de sabor tan desagradable que no es fácil que se coman por gusto.

A la vez que algunas plantas mantienen frutos, ya empiezan a aparecer los brotes florales, que tardarán en desarrollarse varios meses e irán cambiando de color y el aspecto de la planta, que de esa manera y por lo sencillo de su mantenimiento en las duras condiciones del centro peninsular, me parecen uno de los mejores arbustos que se pueden poner en un seto.

Es algo parecido es lo que ocurre con los madroños, Arbutus unedo, cuyos frutos empiezan a madurar mientras que brotan las nuevas flores. A lo largo del año hay muchas posiblidades de que una tormenta o cualquier otra causa los dañe, así que el rendimiento en frutos es muy variable. Los años buenos aprovecho para hacer licor macerándolos en anisete dulce. Si la cosecha es baja no cojo ninguno y de todos modos siempre reservo una parte para las aves, junto con otras bayas que tengo repartidas por el jardín como ya mostré el año pasado.

También he dado por terminada la temporada de colectar, en mi propio beneficio, los frutos de la higuera, Ficus carica, que mantengo en verano cubierta por una red. Ahora la retiro para dejar los higos a disposición de los pájaros, cuando más empiezan a necesitarlos.

Y último por hoy, pero no en el jardín, algo muy especial para mí, la bellota de los robles melojos, Quercus pyrenaica, que este año han producido mucho fruto. Especial ilusión porque los planté yo mismo a partir de bellotas hace ahora 12 años, al poco de mudarme a esta casa. Ya el año pasado dieron alguna que otra bellotita, pero este año están en plena producción. También este año han tenido agallas de un par de especies, lo que es como la mayoría de edad de mis robles, pues siento que están integrados en el ecosistema con sus insectos comensales y parásitos y, supongo, que muchos más animales que aún me quedan por descubrir.

Creo que así mi jardín está contribuyendo a mantener la biodiversidad e incluso aumentarla en un entorno de prados bastante monótono y de jardines con muchas especies no autóctonas, incluido en mío, que también tiene sus concesiones a la estética.

12 comentarios:

  1. Enhorabuena por tan bello jardín. Qué tiene lo suyo mantenerlos y cuidarlos como requieren...

    Abrazos.

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  2. Bonita colección de plantas.
    Yo los remataba (no sé si también los tienes) con algún pie de Granado, Lentisco y algún palmito.

    Ahora dá gusto salir al monte por aquí, te puedes pasar el dia comiendo dátiles y granadas.

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  3. Gracias. Tengo un granado, pero no se me da bien, la mayoría de las flores caen sin fructificar y antes de que maduren, las pocas que crecen, se las comen los pájaros también.
    El palmito creo que se helará, ten en cuenta que no son raras varias noches al año a 8º bajo cero y mucho tiempo seguido de unos 3º bajo cero.

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  4. En primer lugar: felicidades y enhorabuena por la fructificación de los robles...¡Abuelo!
    Y después, agradecerte la paciencia, el conocimiento y el buen gusto que aplicas a tu jardín. Algo que estimamos en lo que vale, tus amigos y tus muchos inquilinos.

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  5. "no son raras varias noches al año a 8º bajo cero y mucho tiempo seguido de unos 3º bajo cero"

    ¿Ves tú porque me gustan más estas latitudes? ... y aún se me antoja excesivamente frio el nuestro!!
    Me pasa a mí lo que tu cuentas y me tienen que encerrar de un ataque de nervios. El frio para los esquimales... :-)

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  6. Qué proliferación!

    Me ha gustado mucho la passionaria, sin desmerecer a sus compañeras de jardín claro.

    Me das un poco de envidia.

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  7. Bueno, Javier, habrá que rematar la jugada plantando alguna de estas bellotas para poder decir que soy abuelo de esa generación de robles. ¡Ya no solo me hace viejo mi hija! Me siento con David el gnomo.
    Mi asignatura pendiente es poner herbáceas que vengan bien a distintas especies de mariposa. Ya te pediré ayuda.

    Trebol, no te creas que yo llevo muy bien lo del invierno. Además, como lo que me gusta bucear... Pero no se puede tener todo, subir montañas saliendo de casa andando también en una maravilla. Lo de comer dátiles directamente de la palmera sí que me da mucha envidia. Me encantan, pero me tengo que conformar con la cosa pringosa y plastificada que nos venden en el súper.

    Mamen, la passionaria es una de las concesiones a la estética, que también a mi me encanta aún no siendpo autóctona, aunque de "esas plantas" se ocupa más bien mi mujer, yo le doy a lo silvestre, que es más fácil de cuidar.

    Saludos a los tres

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  8. Hola Jesús,

    en esta dirección tienes información de cómo crear un jardín para atraer mariposas:

    http://www.imagenesdeasturias.com/web/jardin_mariposas_cubia/PDF/Jardin_para_Mariposas_230209.pdf

    Espero que te sirva de ayuda.

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  9. Gracias Goyo, en cuanto tenga un poco de tiempo la miraré, ahora ando liadísimo.

    Gracias Luuuuuua. Las fotos de tu blog son también preciosas, tienen una luz muy especial.

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  10. Hola compañero,
    excelente el blog, muy interesante.
    Una pregunta a ver si puedes ayudarme. Una parra virgen, Parthenocisus tricuspidata, este año no ha brotado, alguna hojilla, nada, medio muerta, el año pasado estaba exuberante. Los están secos o verdes quebradizos, ¿que pude pasarle? Gracias y saludos.

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    1. Hola Canarius, gracias, pero siento no poder ayudarte. La verdad es que no soy muy buen jardinero, pero es que, además, es muy difícil hacer un diagnóstico de esta manera. Lo único que se me ocurre es que quizás en las proximidades haya echado herbicida o, simplemente que no se ha adaptado al lugar, aunque como no sé desde cuando está allí plantada, todo son meras especulaciones.
      Saludos.

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