Este libro surge después de tiempo de buscar un enfoque novedoso ante las muchas publicaciones nacidas tras la declaración del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama. Cuando conocimos la edición facsímil de “Andanzas castellanas”, libro que fue publicado originalmente en 1917 y su autor es Juan A. Meliá, nos resultó muy impactante ver que nuestra forma de acercarnos a la naturaleza y el campo en general, y no sólo la Sierra de Guadarrama, era muy similar a la que Meliá mostraba en su libro y, por extensión, a la de los pioneros del guadarramismo. Aquel libro se presentó en abril del 2017 en el Museo Nacional de Ciencias Naturales, dentro del ciclo de charlas organizadas por la Sociedad de Amigos del Museo.
Nuestra idea inicial fue repetir los recorridos que Meliá describía en sus capítulos, pero nos dimos cuenta de que los cambios acaecidos desde entonces eran tan radicales que apenas si podíamos hacerlos de igual modo. De hecho, donde entonces Meliá recorría caminos rodeados de campo, encontramos ahora carreteras e incluso una autovía. Así, de forma natural quedó en evidencia que en lo que más nos debíamos centrar era en los cambios, y a su vez, restringir a la Sierra de Guadarrama el espacio tratado.
No me voy a extender en la descripción del libro de Meliá, pues en el momento de su presentación hice una completa reseña en mi otro blog “Observatorio de El Ventorrillo”, que puede verse en este enlace:
https://blogventorrillo.blogspot.com/2017/05/andanzas-castellanas-por-nuestra-sierra.html
Juntos o por separado, Javier y yo hemos recorrido nuestra Sierra desde hace mucho tiempo, cada uno con nuestros propios intereses, yo más zoológico y él más botánico y paisajístico, además de haber estado más implicado en la reivindicación ecologista. Y nos dimos cuenta de que también resultaban 100 años si sumábamos los aproximadamente 50 que llevamos cada uno recorriendo sus senderos.
El resultado es una mezcla de contenidos que hemos agrupado en ocho temas principales: Paisaje, forestal, Usos, Fauna serrana, Fauna alterada, Fauna invasora, Flora/vegetación y Deterioro. Además de una presentación de nosotros mismos y nuestra relación con la Sierra de Guadarrama, que hemos llamado “Andanzas vitales”.
Tenemos también la fortuna de que dos grandes de la protección y conocimiento de la Sierra, Eduardo Martínez de Pisón y Julio Vías, nos hayan querido regalar unas líneas de prólogo aportando un valor añadido a nuestras experiencias.
En lo que a mi corresponde, tenía especial interés en destacar la fecunda investigación realizada por investigadores del Museo Nacional de Ciencias Naturales en ese tiempo, donde yo he desarrollado la mayor parte de mi vida laboral, desde Graells hasta las más recientes investigaciones sobre zoología y conservación. Destacan las descripciones de nuevas especies y subespecies para la ciencia, como Graellsia isabelae, la subespecie Parnassius apollo dedicada a Escalera, los escarabajos pipa del género Iberodorcadion, la subespecie Canis lupus signatus y Capra pyrenaica victoriae descritas por el mastozoólogo Ángel Cabrera. De más actualidad son los trabajos para salvar de la extinción a algunos de nuestros más emblemáticos anfibios serranos, modelo para el resto del mundo. Yo mismo he podido observar en las últimas décadas cómo la distribución de las lagartijas ha ascendido ocupando unas el espacio que antes tenían otras debido al cambio climático, que se evidencia también por la ausencia de nieve.
Sapo partero, Alytes obstetricans, macho cargando con la puesta. |
También se muestra nuestra preocupación por las especies invasoras e introducidas, como es el caso de los peces, cangrejos y almejas que invaden nuestros ríos y lagunas.
Dentro del apartado “usos” me interesaba tratar la importancia de las razas autóctonas de ganado, pues tengo la opinión de que en los parques nacionales se deberían fomentar las razas que proceden de las regiones donde están situados y, de esa manera, apoyar a los ganaderos que están manteniendo esas variedades que en ocasiones se encuentran en peligro de extinción. El primer paso para que sean valoradas por los visitantes de la Sierra y consumidores de sus productos, es conocerlas como patrimonio cultural.
Un vestigio de la historia de la Sierra, y de España en general, interesante y aún muy desconocido, son las torres de telegrafía óptica, que fueron objeto de un ambicioso proyecto lamentablemente abortado, pero que nos ha dejado unas restauraciones dignas de ser admiradas. Igualmente, los restos de pequeñas canteras para la extracción de granito, de las que algunos municipios y particulares atesoran imágenes, herramientas y materiales que bien podían formar parte de un museo de referencia pero, en cambio, las propias canteras se encuentran en un lamentable estado de abandono llenas de escombros y son objeto de vandalismo con pintadas, así como pobladas con especies de peces invasoras, que impiden el desarrollo de poblaciones estables de anfibios, grupo zoológico en franco retroceso, también amenazado por los tóxicos y la sal vertida en las cunetas.
Torre del Telégrafo en Cabeza Mediana. |
Aunque haya referencias antiguas de su presencia puntual, poco nos podíamos imaginar que al pie de la Sierra iban a invernar miles de gaviotas, además de que podríamos ver en sus embalses patos, gansos exóticos, cisnes y otras aves acuáticas no propias de nuestra región.
Gaviotas reidoras invernantes en el embalse de Santillana. |
Por supuesto, incluyo entre los acontecimientos por los que ha pasado la Sierra, lo que hoy conocemos como Estación Biológica El Ventorrillo, donde he tenido el placer de trabajar.
Puede complementarse la información sobre el libro en el siguiente enlace al artículo del blog de Javier Barbadillo:
https://enelultimorincon.blogspot.com/2022/03/
El martes 26 de abril a las 7 de la tarde está prevista una presentación y firma del libro en el Salón de Actos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y el libro puede adquirirse en la editorial y muchas otras librerías y, por supuesto, en la tienda del Museo. Hay que reservar plaza por haber aforo reducido.
Prólogo 1. Un siglo de la Sierra. Por Eduardo Martínez de Pisón
Prólogo 2. Por Julio Vías Alonso
El cómo y los porqués de este libro
1. ¿Por qué vivo en la Sierra?
2. La primera vez
3. Qué nos da y qué nos quita la Sierra
4. Mi vinculación con la Sierra
5. Escapar a vivir a la Sierra
PAISAJE
6. El complejo alpino del Guadarrama
7. La Sierra urbanizada
8. Viejas canteras, nuevas lagunas
9. Hitos de cumbre: los vértices geodésicos
10. La Sierra crucificada: cruz de Cuelgamuros o del Valle de los Caídos
11. Una bola con antenas
12. Naturalidad-artificialidad en los paisajes serranos
13. Tan cerca, tan lejos, del Guadarrama
14. Sobre el derecho a disfrutar de la Sierra
FORESTAL
15. La Sierra y sus circunstancias forestales
16. De la aflicción a la complacencia leñosa
17. Pinares naturales y plantados
18. Melojares arrasados y recuperados
19. La gran reforestación
20. Efectos negativos de las repoblaciones
21. Vuelo casero sobre laderas aterrazadas
22. Nuevos enfoques forestales
USOS
23. El ganado serrano, razas autóctonas
24. Telegrafía óptica
25. El Ventorrillo, rincón histórico y centro de investigación
26. Muros del agua
27. Guarramillas, la montaña domesticada
28. ¿Esto es Hollywood?
29. La Sierra ajardinada
FAUNA SERRANA
30. Graellsia, emblema de la Sierra de Guadarrama
31. Apolo, la mariposa de las cumbres
32. Iberodorcadion. Los curiosos escarabajos pipa
33. Mariquitas alpinistas
34. Anfibios de Peñalara, luchando contra su extinción
35. Lagartijas de roca, cuando ya no hay montaña a la que subir
FAUNA ALTERADA
36. Las gaviotas que descubrieron Madrid para invernar
37. El regreso de la cabra montés
38. ¡Que viene el lobo!
39. No hay paz para palomas y tórtolas
40. Luciérnagas, ilusiones que se apagan
41. Ardillas funambulistas
FAUNA INVASORA
42. Peces, perdiendo biodiversidad
43. Salvelino, la “trucha” de Peñalara
44. Visón americano y nutria, dos casos contrapuestos
45. Marisco serrano: cangrejos y almejas
46. Patos exóticos en la Sierra
47. La chinche de los piñones, el enemigo americano
FLORA / VEGETACIÓN
48. Los fresnos
49. Descubriendo la flora serrana
50. Insólito avance del muérdago del pino
51. Náufragos, supervivientes, resucitados, advenedizos y fantasmas
DETERIORO
52. En defensa de la Sierra. La historia jamás contada.
53. Estaciones de esquí alpino: islas urbanas
54. Lo que queda de Valcotos
55. Humedales urbanizados: lagunas de Pryconsa y El Carrizal
56. Vida y muerte en la cuneta
57. Arde Guadarrama
58. Contaminación lumínica
59. Cambio climático y sus evidencias
60. Demasiadas huellas
ACONTECIMIENTOS
ESPECIES CITADAS
BIBLIOGRAFÍA CITADA
BIBLIOGRAFÍA NO CITADA
Repetindo as palavras que deixei no blog de Javier Barbadillo...
ResponderEliminarParabéns aos dois grandes amigos blogueiros que há tempos estou em falta... aos poucos vou voltando à blogosfera que tanto me agregou conhecimento.
Sucesso a ambos!
Saúde!
Um beijo
Algo falla al escribir comentarios. Volveré a intentarlo.
ResponderEliminarDecía que el libro es muy interesante, que muchos de los contenidos hablan de aspectos que la Sierra de Guadarrama tiene en común con la zona de Arija y entorno, así que también es de mucha utilidad para mi.
A F.J. Barbadillo y a ti gracias por vuestro trabajo.
¡Enhorabuena!
Muchas gracias Chelo, tú siempre tan amable. Me alegro que te guste el libro.
EliminarYo también he tenido problemas con la publicación de este comentario, pero de todas formas, lo habitual es es que tarde un poco en publicarse porque lo tengo que autorizar Lamentablemente recibo bastante spam y tengo que eliminarlo antes de que se publique.