Tras haber mostrado las observaciones y experiencias en el refugio de insectos de mi jardín bueno es echar un vistazo a lo que he podido ver en otras de estas instalaciones.
La primera de ellas, en la que también participé, es la del Jardín de Mariposas de Miraflores de la Sierra. Es una actividad que está en sus inicios, con poquísimo presupuesto y mano de obra totalmente voluntaria, con lo que no ha podido desarrollarse mucho a pesar de los esfuerzos de Teresa Ajenjo de Biodiversidad Virtual. El refugio se hizo aprovechando una estantería de nuestro amigo José Pascual, también de BV. Digo era porque primero un cierto vandalismo y después una tormenta lo desmontaron. Ya estamos preparando otro para esta próxima primavera. Espero que en estos próximos años vaya creciendo.
A pesar de todo y de instalarse con la estación bastante avanzada, la verdad es que los insectos lo utilizaron:
En esta primera foto se puede ver que las abejas Osmia han sellado uno de los orificos en los troncos, luego hubo alguno más.
Y en el hueco de uno de los ladrillos una avispa alfarera ha hecho su nido de barro. No sé la especie porque nunca la llegamos a ver.
En otro de los huecos fue una Mantis religiosa la que aprovechó el refugio para depositar la ooteca con sus huevecillos.
Entre la hojarasca, palitos y cortezas también criaron las tijeretas, las vimos salir cuando estábamos reorganizando su interior.
En la siguiente foto muestro la estructura del próximo montaje, hecho con maderas recicladas. Le faltan las baldas, la impermeabilización del tejado y, por supuesto, todos los elementos como troncos, cañas, ladrillos, etc. que pretendemos sean aportados por voluntarios, especialmente niños, para que así sean partícipes del proyecto.
Otros refugios, que me gustó mucho ver el verano pasado, fueron los situados en el Parque Natural de las Salinas de Santa Pola. Son instalaciones robustas y muy bien protegidas, con un texto explicativo. Creo que es magnífico este tipo de instalaciones en lugares de acceso a visitantes no solo por los insectos en sí, sino por su labor educativa, aunque por experiencias propias sabemos que tienen sus riesgos.
Otros refugios, que me gustó mucho ver el verano pasado, fueron los situados en el Parque Natural de las Salinas de Santa Pola. Son instalaciones robustas y muy bien protegidas, con un texto explicativo. Creo que es magnífico este tipo de instalaciones en lugares de acceso a visitantes no solo por los insectos en sí, sino por su labor educativa, aunque por experiencias propias sabemos que tienen sus riesgos.
Tiene variados tamaños de agujeros en troncos y cañas, que en ese entorno son muy abundantes.
Claramente lo han utilizado las abejas, que ya han sellado algunos orificios, También se aprecia que algunos agujeros han sido picados, no sé si por algún otro insecto, ave o incluso roedor en busca de larvas.
Y entre las cañas, bien escondido, había un gran saltamontes, no llego a más con la identificación porque no quise molestarlo y en la foto no creo que se pueda identificar.
Y aunque no tengo foto, también habitaban en el refugio un par de orondas salamanquesas, Tarentola mauritanica.
Otro de los refugios interesantes, bien instalado y grande está, en la Reserva Ornitológica de Azuqueca de Henares. Esta es su página de facebook.
Aquí una foto cedida por Mar Mayoral otra amiga de BV.
Y a continuación otras fotos de Manolo Andrés-Moreno, que se ocupa de tan magnífico lugar y ofrece unas educativas y amenas charlas a los visitantes.