BIODIVERSIDAD EN ACCIÓN
En el otoño solo unas pocas plantas florecen y, si la temperatura ambiental es lo suficientemente alta, los insectos que aún están activos tienen que buscarlas con urgencia para poder mantenerse con vida. Algunos de ellos, además, tienen que terminar de cumplir su ciclo biológico, bien dejando llenas las despensas donde nacerán y se alimentaran sus larvas o bien haciendo las puestas en los lugares adecuados para que pasen el invierno.
En el otoño solo unas pocas plantas florecen y, si la temperatura ambiental es lo suficientemente alta, los insectos que aún están activos tienen que buscarlas con urgencia para poder mantenerse con vida. Algunos de ellos, además, tienen que terminar de cumplir su ciclo biológico, bien dejando llenas las despensas donde nacerán y se alimentaran sus larvas o bien haciendo las puestas en los lugares adecuados para que pasen el invierno.
Entre las especies de plantas con típica floración otoñal destaca la hiedra (Hedera helix) que con frecuencia forma setos en los lindes de los jardines, como es el caso de una parte del mío.
Las hiedras son unas buenas plantas de cobertura para los límites de las parcelas, aunque tienen tendencia a crecer en exceso y a tumbar las cercas de malla demasiado débiles, cuando son empujadas por el viento. Sin embargo, son muy adecuadas para cubrir muros feos, de ladrillos o de bloques de cemento.
Las hiedras crean espacios muy interesantes para que aniden pájaros y encuentren refugio insectos y pequeños reptiles. Sus frutos son consumidos por las aves y también, y a ello dedico esta entrada, son muy útiles para muchas especies de insectos que encuentran su alimento en las modestas flores en un momento del año muy difícil para su supervivencia.
Mariposas, abejas, avispas de todo tipo y gran variedad de dípteros, que no todo son molestas moscas, acuden a libar de esa especie de extraños microplanetas que son sus flores.
Orden DIPTERA
Famila Calliphoridae
Empezamos el recorrido faunístico por la más común de las moscas que acuden a las flores Chrysomya albiceps. Si no fuese porque la tenemos asociada a los montones de estiércol y carroña, no negaríamos que ese cuerpo verde metálico y los ojos rojos son realmente bonitos.
Otro tanto podemos decir de las moscas, algo más feas, del género Calliphora. Estas dos moscas son con frecuencia utilizadas por los forenses para determinar el tiempo desde el fallecimiento, ya que son de las primeras en llegar al cadáver a poner sus huevos y los tiempos de sus ciclos y su relación con la temperatura ambiental están muy bien estudiados.
Calliphora sp. |
Familia Muscidae
La siguiente mosca no es la doméstica, aunque se le parece mucho y casi seguro que es del género Musca.
Musca sp. |
Familia Syrphidae.
Esta familia incluye a muchas especies que por su coloración y característico zumbido imitan a las avispas y abejas para evitar ser atacadas por algunos depredadores. Algunas imitan a especies concretas y otras tienen un parecido más genérico.
La siguiente especie Syritta pipiens se caracteriza por los fémures ensanchados.
Syritta pipiens |
Como pequeños abejorros negros, también visita la hiedra este díptero del género Cheilosia. Las larvas de las dos especies se encuentran entre vegetales y hongos.
Como la especie que vimos en la entrada sobre los pulgones, las larvas de Syphus vitripennis también se alimentan de esos áfidos y son por lo tanto aliados de los agricultores y jardineros.
Syphus vitripennis |
Pero quizás los más inofensivos y perfectos imitadores de abejas sean como este brillante y amarillo Myathropa florea, que tan pronto liba en las flores como descansa en las hojas de la hiedra. Sus larvas se alimentan entre el material vegetal en descomposición de zonas encharcadas, supongo que mi estanque y su jardinera pantanosa tiene algo que ver en lo abundantes que son en mi jardín.
Myathropa florea. |
Lo mismo puede decirse de Eristalis, moscas zángano cuyas larvas, llamadas cola de rata, viven en zonas encharcadas.
La más grande de la familia es la especie Volucella elegans, podéis haceros idea de su tamaño por comparación con las flores de las fotografías anteriores. Además, al volar producen un sonoro zumbido que puede asustar a cualquiera pensando que es un abejorro o avispón. Todo lo contrario, estas "grandes moscas" inofensivas eran perseguidas por el avispón que mostraré más adelante. Las Volucella tienen por costumbre pararse en medio de los claros de bosque, a veces en medio del camino, y una y otra vez se colocan en el mismo lugar. Es un buen divertimento intentar hacerles una foto en vuelo.
Familia Thachinidae.
Pero quizás la categoría de "monstruo del reino de la hiedra" sea para Tachina (Eudoromyia) magnicornis, que tiene un aspecto así de inquietante. A veces se le llama mosca erizo, no hay duda de por qué. Son también de gran tamaño y llaman la atención entre las flores. A veces no se ve ninguna y, de repente, vienen cuatro o cinco a la vez. Son otros aliados de los agricultores porque controlan las poblaciones de orugas de mariposas, especialmente nocturnas, a las que parasitan. No son tan sofisticadas como algunas avispas, estas moscas se limitan a poner sus huevos cerca de las puestas de mariposa y ya se las apañarán las larvas para alcanzar a sus presas.
Orden HYMENOPTERA
Familia Apidae
Las abejas de la miel, Apis mellifera, no son mayoría en mi jardín, porque no hay colmenas muy cercanas en esta zona urbanizada, pero sí que hay bastantes ejemplares en todo tipo de flores. A diferencia de los dípteros y algunos otros himenópteros, que simplemente liban el néctar, las abejas de miel lo colectan y también recogen el polen que colocan en las "cestillas" de sus patas traseras.
A esta otra abeja aún la tengo que identificar. Creo que es una Eucera, cuyos machos tiene las antenas muy largas. Esta sería una hembra, pero no estoy seguro de haberla determinado bien.
Familia Gasteruptiidae
Una de las especies de avispa que solo acuden por necesidades energéticas propias son los pequeños parásitos Gasteruption sp. pues no hacen nidos, ponen los huevos sobre larvas de coleópteros barrenadores. Para ello las hembras primero tienen que localizar las larvas del escarabajo en el interior del tronco y, por si esa proeza no fuese suficiente, atraviesan la madera con su ovopositor y llegan hasta las larvas en cuestión para inyectarle los huevos.
Familia Vespidae
Otra tipología de avispa parásita es Delta unguiculatum, que es una avispa solitaria y alfarera, de esas que construyen sus nidos como pequeñas ánforas de barro. A su interior llevan diversas orugas adormecidas con su veneno para que sirvan de alimento a sus larvas.
Otra tipología de avispa parásita es Delta unguiculatum, que es una avispa solitaria y alfarera, de esas que construyen sus nidos como pequeñas ánforas de barro. A su interior llevan diversas orugas adormecidas con su veneno para que sirvan de alimento a sus larvas.
También alimentan a sus larvas con insectos y casi cualquier otro tipo de carne, las avispas comunes como Vespula germanica, aunque éstas son coloniales y hacen nidos de papel a base de masticar fibras vegetales. En el jardín también hay avispas del género Polistes, pero en esta ocasión no las he fotografiado en la hiedra.
Y a continuación, el más malo de la película, el avispón, Vespa crabro. Es el más grande de los himenópteros que visitaban las flores de hiedra, pues curiosamente los abejorros prefieren otro tipo de flores. El avispón muy rara vez se posaba a "repostar" néctar y lo hacía de manera muy rápida, me costó hacerle la foto. Lo que hacía era patrullar como si fuese un helicóptero, o mejor dicho como un azor, revisando los racimos de flores a la búsqueda de insectos posados y al ataque de los que salían volando. Fui testigo de una rapidísima captura. Se lanzó sobre un sírfido, y juntos cayeron entre las hojas del suelo, lo acuchilló con el aguijón y salió volando en línea recta hacia el olmo del jardín donde, me temo, tienen un nido. Lo comprobaré cuando caigan las hojas, ahora no se ve nada.
Varias veces vi ataques infructuosos contra ejemplares de Voluchella, a los que incluso perseguía en vuelo, pero estos son muy veloces y maniobran con gran rapidez. Supongo que lo normal es cazarlos cuando están concentrados libando.
Los avispones también son coloniales, pero en otras ocasiones que he encontrado nidos me he dado cuenta de que suelen ser muy poco agresivos. Quizás he tenido suerte.
Familia Formicidae
Por supuesto, en casi ninguna planta pueden faltar las hormigas, que allí estaban chupando con fruición las florecillas.
Por supuesto, en casi ninguna planta pueden faltar las hormigas, que allí estaban chupando con fruición las florecillas.
Orden LEPIDOPTERA
Familia Nymphalidae
Y también alguna que otra mariposa se pasó por allí, aunque ninguna pude fotografiar y he tenido que echar mano de esta foto de octubre de hace un par de años. Es un ejemplar de la vanesa de los cardos, Vanessa cardui, que muestra que ya está en las últimas de su ciclo vital, con las alas bastante deterioradas.
En resumen, tenemos en estas flores un bonito ejemplo de lo que es la Biodiversidad: Diversidad de especies en distintos grupos animales, diversidad de ciclos de vida y de formas de alimentarse e interrelacionarse.
Y todo esto en una sola planta, sin moverme de un metro cuadrado, en dos días y más o menos una hora cada día dedicado a mirar y hacer fotos. Eso sí, con la ayuda y años de experiencia de mis amigos de Biodiversidad Virtual para saber qué es lo que estaba viendo y algo de búsqueda de información posterior para interpretarlo. Muchas gracias a todos los expertos que han colaborado en ello.
Y todo esto en una sola planta, sin moverme de un metro cuadrado, en dos días y más o menos una hora cada día dedicado a mirar y hacer fotos. Eso sí, con la ayuda y años de experiencia de mis amigos de Biodiversidad Virtual para saber qué es lo que estaba viendo y algo de búsqueda de información posterior para interpretarlo. Muchas gracias a todos los expertos que han colaborado en ello.
Todo un mundo en una sóla planta
ResponderEliminarAsí es Joaquín, si nos fijamos un poco nos damos cuenta de que es así con muchas de las plantas de nuestro entorno, especialmente si son especies autóctonas.
ResponderEliminarSaludos.
Apabullante biodiversidad atraída por la hiedra. Con razón algunos se quejan de que estas plantas "crían mucho bicho"...¡Y que lo sigan haciendo!
ResponderEliminarUn abrazo.
Los bichos que vienen al jardín son como el termómetro que mide mi éxito o unas buenas notas al final de curso. Un abrazo Javier.
ResponderEliminarLa cantidad de vida que puede llevar encima una hiedra!
ResponderEliminarMe ha gustado mucho esta entrada. Se la paso a algunos amigos que también sé que les va a gustar.
La Eucera, sí podría ser E. longicornis. En mi antiguo jardín tuve varias visitando flores de plantas y durmiendo en los huecos de una roca.
Un saludo
Gracias Goyo, espero que los colegas de BV me confirmen el nombre de la abeja.
EliminarSaludos.
Rectifico: no se trata de una E. longicornis. Una de las personas que más saben de insectos de España y parte del extranjero, ha visitado tu blog y me ha dicho: "La abeja de las hiedras no es Eucera longicornis y prácticamente es imposible de determinar con certeza por la posición y otros motivos, como la falta de vistas laterales." así que creo que te vas a quedar con las ganas de saber el nombre de la abeja en cuestión.
EliminarBueno, pues añado una foto lateral por si es posible saber algo más de ella.
EliminarMuchas gracias.
Preciosa entrada, lo que nos perdemos si no miramos a esa escala la naturaleza más cercana ... muy buenas las fotos!!
ResponderEliminarSaludos,
Gracias Cesar. Así ocurre, que a veces es como que tenemos que ir con la idea de ver unas cosas u otras, es imposible estar a todo. Por eso es tan gratificante salir al campo con colegas de otras especialidades. Saludos.
ResponderEliminarHola Jesús:
ResponderEliminarEnhorabuena por la entrada y por el blog, están muy bien.
No soy ningún experto, solamente un simple observador de la naturaleza, pero a la Polistes la veo algo "rarilla". No me hagas mucho caso pero a mí se me tira a Vespula germanica.
Un saludo,
Luis
Gracias Luis. Sí, yo también la veo rara y me temo que tendré que esperar también a que los amigos de BV den su veredicto.
EliminarSaludos.
De nuevo gracias Luis, tenías toda la razón, Leopoldo Castro de BV me ha confirmado que se trata de Vespula germanica. Con amigos así da gusto.
EliminarSaludos.
Tremendo ovipositor el de Gasteruption, parece de ciencia ficción. Muchas personas no quieren tener hiedras en sus jardines justo por lo que a ti te gustan, que tienen muchos "bichos", en fin ¿qué sería de los jardines sin pequeños animales? Sin ellos no serían verdaderos jardines.
ResponderEliminarUn saludo
Al que no le gusten los bichos siempre puede podar las ramas que florecen, que se distinguen muy bien por tener las hojas de diferente forma. Pero claro, vivimos en el contrasentido de que hay gente que se va a vivir a un chalet y luego le molesta hasta el canto de los pájaros.
EliminarSaludos Pedro.
Que suerte Jesús por disponer de un equipazo de identificación. Me gustaría tener más tiempo para los insectos, por que mi hiedra tiene fauna pero, está a 130 km de donde vivo habitualmente. De vez en cuando le echo un vistazo y aunque sea sin identificar, veo mucha alegría.
ResponderEliminarA pesar de los desagradables devaneos de la mosca verde, también veo en el verde metalizado y el rojo de los ojos cierta belleza y, como no, una gran labor limpiadora.
Saludos.
Hola Javier, Todos podemos contar con ese equipazo de identificación y además ser miembros de ese equipazo, más grande aún, de fotógrafos que aportan sus imágenes para un mejor conocimiento de la Biodiversidad. En un momento en que parece que los egoísmos son lo que impera y lo que nos quieren imponer "nuestros" gobernantes, esta plataforma es toda una lección de solidaridad ciudadana.
EliminarEnhorabuena por el artículo!. Lo hemos compartido en la página de Facebook "La colmena viajera", dedicada a divulgar la importancia de los polinizadores (silvestres y domésticos) en los ecosistemas terrestres. Como curiosidad, comentarle que el avispón, aunque es un reconocido "cazador", al menos aquí en Asturias lo hemos visto también embadurnado de pólen y alimentándose de néctar en algunas plantas.
ResponderEliminarSaludos,
Manu.-
Gracias Manu. Sí claro, los avispones adultos, como la mayoría de las avispas, se alimentan de polen y néctar, como está haciendo el de la foto, pero cazan otros insectos para llevarlos al nido para sus larvas, que son carnívoras, aunque quizás también reciban algo de ese polen y néctar.
EliminarSaludos.
Me ha encantado! Mira que me gustan los insectos, la pena es no saber tanto como tú. Ese pequeño mundo! Muy interesante. Y qué bonita la abeja sin identificar. Saludos!
ResponderEliminarMe empeño en ir aprendiendo, Mamen, es todo un mundo en el que siempre hay algo que descubrir y contar.
EliminarUn abrazo.
Ya poco mas se puede decir de entrada, solamente darde las gracias por enseñarnos a mirar las pequeñas cosas. Un saludo
ResponderEliminarComo amigo de BV ya sabes que la mayor parte de la información es posible gracias a mucha gente que hay ahí detrás.
EliminarSaludos.
Preciosíssima entrada e uma boa contribuição entomológica!
ResponderEliminarSempre tive atração pelos insetos pela grandiosidade que representam na polinização e variedade de cores e formas.
Uma entrada para estar sempre consultando.
Beijos e flores de primavera brasileira repleta de pólen e insetos. :)
¡Quien estuviera en Brasil esta primavera!
EliminarNos conformaremos con el otoño que entra en España, que también tiene muchos atractivos.
Un saludo Teca
¡Qué interesante entrada! que junto a la que publicaste recientemente sobre el mismo tema me hizo acercarme a una hiedra en mi pueblo para ver si por aqui también cuenta con ese protagonismo y así es ¡increíble! Los comensales más abundantes en Arija han sido las abejas y las avispas, aunque supongo que ésto dependerá de temperaturas y en qué época del otoño nos acerquemos.
ResponderEliminar¿En cuántos días de observación hiciste estas fotos?
Saludos
Hola Chelo, gracias.
EliminarPues estas del 2013 no lo recuerdo bien, pero las recientes son de un solo día en algo más de un par de horas, unas cuantas justo antes de comer y las otras a la hora de la siesta.
La cuestión es coger el momento justo, cuando el sol da de lleno en la hiedra. en mi casa no es durante mucho rato, porque le da la sombra de la casa.
Saludos.
Extraordinario reportaje, bello, preciso y didáctico. Millón de gracias, Jesús. José Curt
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