Unas veces les pongo una mezcla de semillas y otras solo pipas. Me gusta particularmente ver como los carboneros comunes se llevan las semillas a una rama para comérselas tranquilamente.
Pero la especialidad de los carboneros es la ristra de cacahuetes donde, hasta ahora, no tenían que disputar la comida con los gorriones. Por cierto, que las ristras de cacahuetes las he ido acercando cada vez más a la ventana de mi cocina y ahora, estos descarados pajarillos se alimentan a unos escasos 75 cm de mí. Estas dos fotos están realizadas con el objetivo de 50 mm. Eso sí, al otro lado del cristal.
Si recordáis, en otra entrada hablaba de cómo los gorriones habían aprendido a comer pipas de un girasol tras meses de haberlo ignorado, cuando vieron que un carbonero lo hacía. Bien, pues su último aprendizaje es hacer piruetas para comerse también las semillas de cacahuetes.
Aún no saben abrir las cáscaras con tan perfectos agujeros como hace el párido y no paran de aletear mientras se cuelgan, por eso la foto es tan mala. Están atentos al carbonero y en cuanto ven que ha abierto una cáscara, acuden para ver si queda algo en su interior.
- Gorrión de bellota
- Gorriones aprendiendo de los carboneros
- Gorrión albinoide