Un ejemplo de diversidad dentro de la especie.
Con esta maravillosamente húmeda primavera, los campos de mi entorno están exuberantes de plantas herbáceas y sus correspondientes flores. Margaritas, ranúnculos, orquídeas, campánulas, dedaleras y muchas otras, son un regalo para la vista en cualquier paseo por los montes y prados.
Entre ellas me llamó particularmente la atención este ramillete de hierba turmera, Tuberaria guttata. Sabía que esta florecilla tenía diversos diseños y tamaños, pero nunca me había fijado en que se presentaban tan juntas las distintas morfologías.
En un corto recorrido pude fotografiar tanta variedad como muestro a continuación:- Con las máculas de los pétalos pequeño tamaño.
- Con las máculas también pequeñas pero con los pétalos más estrechos y separados.
- Con las máculas pequeñas y un anillo rojizo alrededor.
- Igual pero de mayor tamaño.
-Más grande aún y con los pétalos solapados como en un botón de oro.
- Y lo mismo pero con los pétalos más estrechos, que no se solapan entre sí.
Pero estas variaciones no nos sorprenden demasiado, porque dentro de la misma familia de plantas, las cistáceas, tenemos en el mismo territorio un arbusto bien conocido: la jara pringosa, Cistus ladanifer, que tanto se puede encontrar con manchas en los pétalos...
... como sin ellas.Sabemos que este tipo de manchas, en la base de los pétalos, sirven para llamar la atención de los insectos polinizadores, a modo de señalizador que les indica donde está el néctar y, de paso, donde se impregnarán de polen. Y es muy curioso que muchas flores sin manchas, para nuestros ojos, vistas con luz ultravioleta sí que las tienen. No es casualidad que la visión de los insectos sea sensible a la luz ultravioleta y, por lo tanto, aprecien las marcas que nosotros no podemos ver.
Esta variabilidad, así como la capacidad de hibridación de estas y muchas otras plantas, es lo que ha permitido tan gran cantidad de variedades de flores de jardín.
Ya hice una entrada dedicada a las jaras, se puede ver AQUÍ
EDITO Y AÑADO: Javier Barbadillo, llegado desde "El último rincón" me advierte del reciente cambio de género de la hierba turmera, que ahora se denomina Xolantha guttata. Gracias.
Un hermoso recorrido por la variabilidad de esta familia tan mediterránea y agradecida.
ResponderEliminarSaludos entre las jaras, Jesús.
Que bonitas son las jaras....tan frágiles.....
ResponderEliminarEs espectacular la gran variedad de formas y colores, me quedo sorprendido; bueno, yo siempre me sorprendo. Resultaría interesante saber, qué formato del dibujo de sus pétalos resulta más atractivo para los polinizadores.
ResponderEliminarPor cierto, ¿había hipocistos por esos montes de jaras?
Saludos.
Quizás el dibujo de las manchas en los pétalos corresponda con la abundancia de según qué especies de insectos polinizadores haya por la zona, quiero decir, las jaras pringosas con manchas puede que estén en lugares con una mayor población de insectos polinizadores de la especie A, mientras que las jaras pringosas sin manchas puede que crezcan en lugares donde predominen los insectos polinizadores de especie B, eso podría explicar el fenómeno, pero la hipótesis queda tirada por tierra cuando crecen en un mismo lugara jaras con y sin manchas en los pétalos en un mismo lugar.
ResponderEliminarAlguien se atreve a lanzar alguna otra hipótesis o a perfeccionar la mía?
Hola Javier, gracias por las indicaciones.
ResponderEliminarLas dos plantas son tan típicas de estas zonas de sierra baja.
Gracias Sylvia, sí que son preciosas. Te he dejado un comentario sobre los hipocistos de tu entrada que casualmente me pregunta también Javier 16
No, Javier (16), no los he visto, pero debo confesar que tampoco las he buscado expresamente. Ahora que me lo recuerdas las buscaré, porque es casi al lado de mi casa.
Los naturalistas lo seguimos siendo porque no hemos perdido la infantil capacidad de asombro. No lo solo lo digo yo, lo dijo el gran Félix.
No, Goyo, no. He visto lugares donde domina mucho una "variedad" sobre otra, pero aquí, al lado de casa, están tan juntas que a veces hay que mirar tallo abajo para asegurarse de que las flores pertenecen a distintos pies.
Podía ser interesante si hay preferencias por distintos insectos, pero lo dudo mucho. También sería curioso ver su genética.
Saludos a todos, y gracias.
Desconocía lo de las manchas ultravioletas Jesús. Siempre es un placer pasar por aquí. Nunca te vas de vacío.
ResponderEliminarUno puede caer en la tentación de intentar ver cada variedad floral como una adaptación a distintos polinizadores especializados. Pero por lo que sabemos de polinización en plantas mediterráneas, la cosa no parece ir por ahí... Saludos naturalistas, Jesús.
ResponderEliminarUnas de mis preferidas, las Xolanthas, abunda mucho por estos lares, la globurarifolia, igual que la guttata, sobre suelos delgados de pinares aclarados con ulex y erica cinerea.
ResponderEliminarSaludos.
Jamás me había fijado en esa diferencia en las flores de las jaras. Muy interesante. Si los insectos aprecian las manchas igualmente, las tengan o no, con su sensibilidad ultravioleta...¿Quizá esas manchas estén destinadas a que las aprecien otros seres vivos que no sean insectos? No sé, es que no le encuentro explicación entonces.
ResponderEliminarSaludos!
Hola Mamen,
ResponderEliminarNuestra mente recional y una mala asimilación de las teorías de la evolución, a veces nos hace buscar razones prácticas inmediatas para determinados fenómenos, pero la naturaleza no es tan lógica.
Puede que la presencia o no de manchas en los pétalos sea realmente indiferente y por eso se mantiene en las mismas poblaciones de jaras sin competir y sin excluirse la una y la otra.
Y también puede ser que tenga alguna ventaja, que ahora desconocemos o que se pueda manifestar en otras condiciones o ambientes.
Por poner un ejemplo absolutamente inventado, la presencia de manchas podría permitir que determinados polinizadores quedaran ocultos en la mancha ante depredadores y que eso, a la larga, beneficiase a la jara. Como digo, es una arriesgada suposición, todas esas teorías hay que demostrarlas experimentalmente y con datos.
De todas maneras, quiero aclarar que lo de que las jaras blancas tengan manchas ocultas visibles al ultravioleta es una suposición mía, porque sé que se da en las flores de otras plantas.
Qué curioso Jesús, mucha variabilidad, pero creo que esto es lo habitual en la mayoría de las especies, aún así, siempre es llamativo.
ResponderEliminarSaludos